
Tu cuerpo necesita del colesterol para funcionar bien. Sin embargo, si tienes demasiado colesterol en la sangre, puede llegarse a pegar en las paredes de tus arterias, estrechándolas o incluso bloqueándolas. Lo que pone en riesgo tu salud y llegar a padecer enfermedades cardiovasculares.
La buena noticia es que, llevar control de tu peso, una dieta saludable y ejercicio físico pueden ayudarte a bajar los niveles de colesterol. Aquí tienes algunos consejos para lograr tu objetivo y mejorar tu estilo de vida.
Reduce el consumo de grasas animales Evita ingerir alimentos altos en grasas, como las carnes procesadas (chorizo, salami, mortadela, etc.) y las carnes rojas. Además, disminuye tu consumo de productos lácteos enteros como leche, crema, queso, entre otros. Estos alimentos contienen altos niveles de grasa saturada y colesterol.
Hazte amigo de la fibra Incluye dentro de tu dieta más alimentos ricos en fibra, la cual puedes encontrar en semillas de lino, legumbres, frutas, vegetales de raíz, etc.
Haz tu dieta más vegetal Trata de evitar comer carne o reducir el consumo a una comida a la semana. Sustitúyela por proteína de origen vegetal como arvejas, lentejas, tofu o quínoa ¡Se creativo en la cocina!
Elige bien los carbohidratos Una dieta baja en ingesta de hidratos de carbono puede ayudarte a perder peso y reducir los factores de riesgo cardiovascular. Elige carbohidratos altos en fibra como avena, cereales integrales, fruta, etc.
Controla tu peso Perder peso ayuda a reducir el colesterol malo e incluso una pérdida moderada en la báscula, de unos 4 u 8 kilogramos, puede tener impacto en los niveles de colesterol.
¡Ponte en acción! Realiza ejercicio cardiovascular al menos tres veces a la semana y en sesiones de 60 a 90 minutos para alcanzar una salud cardiaca óptima y para perder peso. Te sugerimos caminar, trotar, hacer bicicleta, nadar, elíptica, remo u otros aparatos cardiovasculares de bajo impacto.
Busca tu nivel de ejercicio óptimo El objetivo debe ser encontrar el nivel de ejercicio que te permita alcanzar una intensidad moderada, ya que esto te ayudará a elevar los niveles de colesterol bueno.
Convierte el ejercicio en un hábito La constancia es fundamental, haz ejercicio de forma regular y tus niveles de triglicéridos descenderán. Los triglicéridos son el único lípido del perfil de colesterol que se emplea como energía.
Cambia tus rutinas de ejercicio Deja a un lado la monotonía, prueba diferentes ejercicios para mantenerte motivado. Mueve otro grupo de músculos, esto reducirá el riesgo de lesiones por uso excesivo y disfrutarás aún más de la actividad física.
Confía en la tecnología Existen muchas aplicaciones que te permiten llevar un mejor control de cómo realizas ejercicio. Algunas tienen rutinas de ejercicio, técnicas de motivación, contadores de calorías y consejos. Otros dispositivos como los monitores de la tasa cardíaca, los podómetros y otros similares pueden ayudarte a planificar tus ejercicios y ayudarte con la motivación.